Familia de cuento: El papel del editor con Cristina Expósito

EL PAPEL DEL EDITOR/A

Hoy vamos a descubrir el papel del editor/a, aunque es uno de los más conocidos en el mundo del libro. Podemos decir que la editorial es donde se termina de cocinar un libro: se juntan texto e ilustración para, al fin, darle un formato físico.

Hoy en día hay cientos de editoriales, las hay más grandes o más pequeñas, pero todas comparten el amor por la lectura y la ilusión por sacar a la luz libros de calidad. Para ello, como escritora, opino que la comunicación constante es imprescindible, aunque no siempre se encuentra. Hay editoriales que tienen claro lo que quieren y cómo lo quieren, por lo que no cuentan con la opinión de las otras partes. Aun así, la experiencia me demuestra que los mejores resultados (en mi caso, los libros más vendidos) surgen de esas largas conversaciones con los editores e ilustradores, de esas tardes de videollamadas para atar todos los hilos sueltos, de esas puestas en común de todo lo que tiene que ver con el libro que estamos creando. Y, aunque parezca un tópico, esos momentos son mágicos. Creo que no hay nada más bonito que el proceso en el que das vida a un libro.

Pero el papel del editor/a no es solo encontrar la unión perfecta entre texto e ilustración, también está en sus manos la decisión de elegir el tamaño del libro físico, las calidades, revisar la maqueta para que todo quede perfectamente hilado, hablar con distribuidoras para que el libro llegue a todos los rincones del país, crear y firmar contratos de edición… Es una tarea increíble, pero variada y dura cuanto menos.

El editor/a tiene mucha responsabilidad, pero también es un privilegiado al poder dejarse llevar por aquello que le dice el corazón cuando lee un texto por primera vez. ¿Te imaginas poder trabajar para que vea la luz esa historia por la que, sin dudarlo, lo apostarías todo? Eso es magia.

ENTREVISTA A CRISTINA EXPÓSITO

Seguro que la gran mayoría ya la conocéis, puesto que tiene un buen número de libros en el mercado. Cristina Expósito llegó a mi vida hace ya algo más de 4 años cuando publicó su primer libro, El gran viaje de Silvestre. Un tiempo después, pasó por Zamora y empezó una gran aventura entre nosotras: hablar a diario, aconsejarnos respecto a nuestros textos, compartir momentos... Pienso en aquella primera tarde juntas y parece mentira todo lo que ha pasado hasta ahora.

Cristina ha seguido su carrera como escritora (que, por cierto, está imparable), pero no se ha conformado con eso, sino que en plena pandemia creó su propia editorial, Alaestrella, de la que, además, tengo el placer de formar parte como escritora con La bibliotecaria.

Desde que comenzó esta nueva aventura, ya han visto la luz tres títulos bajo su sello: El ciclista con biogte, La bibliotecaria y Una noche de aventuras, pero un pajarito me ha chivado que dentro de muy, muy, poquito la familia Alaestrella crecerá con un nuevo título, Leo ¡ten cuidado!, que también llega del puño, la cabeza y el corazón de Cristina Expósito. ¿Ves como está imparable?

Como escritora que ha publicado uno de sus libros con este sello, tengo que decir que es una de las editoriales con la que más cómoda he trabajado porque siempre ha tenido en cuenta nuestra opinión, hemos conocido en cada momento en qué punto se encontraba nuestra historia, hemos tomado decisiones en conjunto y la comunicación no ha faltado en ningún momento. A Cristina se lo he dicho varias veces, pero de no haber publicado todavía junto a ella, sería uno de mis objetivos sin ninguna duda, tanto por la calidad de los libros que está creando como por el supernombre y el hueco que se está haciendo en el mundo editorial. Es una experiencia que recomiendo a todo el mundo.

Y bueno, tras esta presentación, aquí llegan sus respuestas a mis siete preguntas. ¡Qué nervios!

1. ¿En qué momento decidiste dar el salto y crear tu propia editorial?

En primer lugar, quiero darte las gracias por contar conmigo dentro de este precioso rincón de “Familia de Cuento”. ¡Vaya privilegio! En segundo lugar, respondiendo a tu pregunta, que exista Alaestrella es el desencadenante de un cúmulo de casualidades o circunstancias, no algo que yo tenía previsto ni mucho menos.

Como sabes, escribo desde que era una niña y escribir forma parte de quién soy, de mi estilo de vida. No concibo mi vida sin escribir, es algo que necesito hacer como comer o respirar. En paralelo, por supuesto, mi vida siempre ha estado rodeada de libros, de lecturas y, sobre todo, de literatura infantil y juvenil. Un día ideal para mí sería estar todo el día leyendo y escribiendo. No necesito más.

En este caso, cuando estás dentro del mundo editorial como autora ves cómo trabajan otras editoriales y qué cosas hacen bien y qué cosas hacen mal. Y también sientes que hay cosas que tú podrías hacer muchísimo mejor. Lo digo porque mi primer libro fue autopublicado y tuve la experiencia de lo que es la edición.

Por todo esto, desde hace muchísimo tiempo, años diría yo, John, mi marido, no paraba de inculcarme la idea de que creara mi propia editorial, que hiciera del mundo de los libros, mi trabajo nutricional. Veía todo lo que disfrutaba escribiendo, teniendo un nuevo libro, presentándolos en librerías… algo que sigo haciendo cada día. No hay cosa que me haga más feliz. Pero claro, yo nunca le hice caso porque ser editora para mí eran palabras mayores y porque realmente es una profesión que no se estudia para ejercerla. Yo fui a la Universidad para dedicarme a otras profesiones como he hecho hasta ahora.  

El momento decisivo llegó cuando falleció mi abuela en diciembre de 2019. Fue en su lecho de muerte, cuando inmersa en un dolor que me comía, sentí que iba a seguir adelante con este loco sueño de «vivir del cuento». «¿Por qué no intentarlo?», pensé. De ahí el nombre de Alaestrella, en homenaje a ella, una de las personas más importantes que he tenido en mi vida.

Alaestrella es esto, una humilde y trabajadora editorial familiar, que nació gracias a la ayuda económica de mis padres y al apoyo incalculable de mi marido. Por eso, la siento así, como nuestro rincón de amor familiar donde entre todos tomamos decisiones y trabajamos en armonía.  

2. ¿Con qué papel disfrutas más, con el de editora o el de escritora?

Como te decía, no me imagino mi vida sin escribir. Es algo que necesito hacer. Me encanta y disfruto muchísimo escribiendo cuentos infantiles. Es fascinante ver el proceso de creación literario en el que tienes una idea, le das formas, trabajas el texto, lo revisas y lo vuelves a revisar cien veces más hasta que finalmente lees esa historia y sientes «Wow, ¿eso lo he escrito yo?» Por eso, mi sueño como autora es seguir publicando con diferentes editoriales españolas, es decir, que las editoriales sigan apostando por mí. A las que les estoy muy agradecida. Y que, al tiempo, seguir adelante en Alaestrella. Son sensaciones muy distintas.

Como editora también disfruto de este trabajo, aunque está cargado de mucha responsabilidad. Hay infinidad de decisiones que tomar y, sobre todo, mucho dinero invertido en cada libro. Por eso, me rodeo de profesionales que me ayudan y me asesoran en cada paso para no equivocarme.

Estoy muy orgullosa del espíritu de esta editorial, de los libros tan bonito que tenemos en nuestro catálogo, y de los que vendrán. De las personas que nos ayudan a crecer, del equipo tan bueno que hemos creado, de nuestros autores, autoras, ilustradores e ilustradoras y de todo lo que hemos conseguido en apenas año y medio. Recordemos que nacimos en plena pandemia, que en febrero de 2020 nos registramos como editorial, vino el Covid-19, y al final, sacamos el primer libro en octubre de 2020. Nos arriesgamos mucho, pero creo que estamos haciendo un buen camino.

3. El primer libro que vio la luz con Alaestrella fue un título tuyo (El ciclista con bigote), ¿cómo decides qué libros tuyos publicas con tu editorial y cuáles con otras?

Alaestrella se creó para publicar algunas de mis historias, pero también para apostar por las historias de otros autores. En mi caso concreto, no había otra manera de empezar la andadura publicando El ciclista con bigote y ahora Leo, ¡ten cuidado!, por la sencilla razón de que fueron dos proyectos empezados, previstos para ser publicados por otra editorial que cerró. Dos proyectos a los que les tenía mucho cariño y en los que confiaba. Ya después, cuando decidimos publicarlos con Alaestrella, nos pusimos a trabajar con el texto, a terminar ilustraciones, maquetación, etc. Trabajo de muchísimos meses.

Así que cuando tenga que publicar otra de mis historias, creo que el panorama va a ser muy distinto. A veces tengo muy claro qué historia mía encajaría en tal o cual editorial, pero creo que tendría mil dudas qué otra historia mía publicar con Alaestrella. Algún día lo veremos.

4. Llega un manuscrito a tu bandeja de entrada, ¿qué pasos sigues hasta su publicación?

Nos llegan muchos emails y manuscritos, que a veces es complicado atender con la rapidez que me gustaría. Archivamos las historias que nos llegan y las vamos leyendo entre varias personas que formamos la editorial para tomar la decisión de si nos encargamos de su publicación o no. Como sabemos, no se puede publicar todo, ya que solo podemos editar unos pocos libros al año y tienen que ser textos que estemos completamente seguros.

En caso afirmativo, se lo comunicamos al escritor/a y nos ponemos a buscar ilustrador/a. Cada texto requiere de un tipo de ilustración. No todas las ilustraciones valen tampoco. Buscamos posible fecha de publicación y empezamos a trabajar según lo acordado para cumplir plazos. Trabajamos siempre en equipo y con mucha comunicación para que todas las partes que conforman el libro se sientan integradas. Me gusta tomar decisiones entre todos, escuchar a todos los integrantes porque así se trabaja con más ilusión, en armonía, con el único fin de sacar un producto de calidad del que todos estemos orgullosos.

5. ¿Qué tiene que tener un texto para conquistarte?

Al ser escritora, me fijo mucho en que el texto esté bien escrito, que sea una historia que enganche y que esté bien planteada. Por supuesto, el manuscrito pasa después por nuestra correctora, aquí hacemos un trabajo interno y minucioso entre correctora, editora y escritor/a para sacar la mejor versión del texto (en caso de que así fuera necesario). O bien, para pulir esos huecos que quedan, y que el lector no entiende, o para corregir el estilo y la ortotipografía. Pero de antemano, tiene que ser una buena historia la que llega a la editorial, que sea original, que tenga ingenio, que sea atractiva y que no le diga al lector, explícitamente, lo que tiene que pensar. El lector es un agente activo y él mismo tiene que sacar sus propias conclusiones de la lectura de nuestros libros.

Todo esto que comento, no es tarea fácil porque las historias que publicamos no las decido yo sola, es un consenso entre varias personas de la familia. A todos nos tiene que enamorar el texto y hacernos sentir que estamos seguros de apostar y arriesgarnos por él.

6. Una pregunta que no puede faltar: ¿Qué es lo que más y lo que menos te gusta de esta profesión?

Lo que más me gusta es cuando ya tenemos escritor e ilustrador decidido y comenzamos con el trabajo en equipo. Es fascinante ver cómo se le va dando forma al libro, poco a poco, hasta que llegar al papel. Es un proceso precioso.

Lo que menos me gusta quizá es tener la responsabilidad de decidir qué historias sí y qué historias no. Es complicado. Hay mucho en juego. Después, el trabajo como editorial sigue una vez que el libro está en la calle porque ese libro hay que venderlo. Hay muchas tareas de difusión, de marketing, de visibilidad, etc. Creo que es la labor más difícil, hacer que los libros lleguen a muchos hogares, que se hablen de ellos, que lo recomienden, etc. Como escritora estás feliz que ya tienes tu libro en la librería, en la estantería de tu casa, pero como editorial ahora viene la parte más difícil. Tienes que vender ese libro y asegurarte de que le gustará al máximo número posible de lectores.

7. ¿Qué consejo le darías a alguien que está empezando en esto?

Si empiezas como editorial o como escritora, mi consejo es trabajar, trabajar y trabajar. Ser autocrítico y sentir que todo se puede hacer mucho mejor. La humildad en el trabajo te hace crecer. Es la única manera de superarte y de seguir avanzando. Hay que ofrecer calidad al lector. No todo vale.

Por supuesto que hay que leer y mucho, rodearte de otros profesionales que hacen bien su trabajo y trabajar en equipo, porque es la forma más bonita de conseguir resultados satisfactorios.

Si hay algo que me gusta de esta sección es, sin duda, poder conocer los trabajos que surgen en torno al libro desde la experiencia misma de quien lo desempeña cada día. En este caso, me ha encantado que Cristina nos haya contado cómo se gestó el sueño de montar una editorial y cómo está consiguiendo llegar a tener un sello cargado de calidad. Trabajo, esfuerzo y constancia son tres valores fundamentales, como ella misma nos ha contado. Y es que, si te lo propones, ¡los sueños se cumplen!

Gracias, Cristina, por formar parte de esta familia de cuento.

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